Convertirse en un agente de cambios debe ser la nueva norma para crecer. En este momento histórico, es hora de un gran cambio, de un gran movimiento. Es hora de una nueva alfabetización, un Changemaker.
En el corazón de este movimiento se encuentran Ashoka Young Changemakers: una red cuidadosamente seleccionada de jóvenes que han encontrado su poder para crear un cambio para el bien de todos, y que están involucrando a sus pares ya toda la sociedad en la realización de un mundo en el que el cambio sea generador.
Uno de los Ashoka Jóvenes Changemakers de Brasil es Isabelle Christina dos Santos Silva , fundadora de Proyecto Meninas Negras (Black Girls Project). Las niñas de 16 años de este proyecto decidieron hacer algo sobre la falta de oportunidades para niñas y niños de familias pobres. La iniciativa de Isabelle conecta a niñas negras de los suburbios con grandes empresas a través de programas de mentoría que mejoran y desarrollan su crecimiento personal y profesional.
El proyecto busca incluir a estos jóvenes en los entornos académicos, profesionales y culturales de la sociedad que han sido negados social e históricamente. El objetivo de Isabelle está muy alineado con la visión de Everyone a Changemaker: «Una vez que obtienes tu poder, quieres que otros obtengan el suyo», dijo en una entrevista con Jornal Nacional de Globo, el programa de noticias más relevante y visto de Brasil.